Una pregunta de Napoleón Hill puede ayudarnos a analizar mejor nuestras opciones de carrera, no solo en la elección de universidad y programa de estudios. También puede ayudarnos a evaluar con más consciencia nuestra continuidad en un trabajo o la posibilidad de un cambio. Incluso la pregunta puede servirnos para evaluar nuestros hábitos, nuestras relaciones y nuestras perspectivas sobre la vida. Te invito a sentarte con un cuaderno y tomar notas a partir de la siguiente reflexión:
"¿Dónde estarás y que serás dentro de 10 años si sigues en el camino que estás actualmente?
Si la respuesta a esta pregunta te muestra una realidad acorde con tus valores y expectativas, sin duda alguna hay que redoblar la velocidad sobre ese camino. Si la respuesta te lleva a ideas que te significarán crecimiento y adaptabilidad, entonces vamos por una ruta positiva. Recordemos que ante este tipo de reflexiones, todo lo que no nos lleve a evolucionar y ser más resilientes ante los cambios del entorno hay que cuestionar su continuidad.
Si la respuesta a esta pregunta nos indica que no estaremos sumando valor a nuestra vida, es un momento ideal para iniciar un cambio de rumbo. Cuesta trabajo explorar esos futuros. Podemos hacerlo de la mano con gente que queremos o con mentores. Podemos hacerlo viendo referencias con personas que han seguido decisiones de carrera similares a las nuestras por medio de noticias o redes sociales. Eso nos puede aproximar a lo que podríamos esperar de manera probable.
Hoy que estamos en los primeros días de un nuevo año podemos hacer de este ejercicio un momento fundamental para guiarnos en los próximos meses de la mejor manera.
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