Ayer escuchaba una conferencia de John Maxwell, experto en liderazgo y uno de mis autores favoritos. Hay un contraste de ideas que hacía en su charla que me pareció inspirador y pertinente para compartirlo por aquí. Nuestro impacto puede ser tan grande y perdurable como nosotros lo imaginemos. El punto clave es ir un paso más allá siempre. Por ejemplo:
Tener un libro es bueno.
Si cambiamos nuestra vida por implementar alguna idea de libro es grandioso
Para un líder, tener seguidores es bueno.
Si invertimos en esos seguidores para reproducir líderes con mejores valores y capacidades que nosotros, eso es grandioso.
Cumplir con todas las actividades de nuestra agenda es bueno, es lo que debemos hacer.
Cumplir con nuestras actividades al tiempo de asistir a un colega, o cumplir dando más al corregir un error de otros para bien de toda la tarea es grandioso.
Cuidar de nuestro cuerpo es bueno, es requisito fundamental para impactar a otros.
Cuidar de nuestro cuerpo y darle exigencias incrementales de desempeño para potenciarlo es grandioso.
Cumplir con un servicio al cliente es bueno.
Cumplir con el servicio mientras sonreímos y nos interesamos en la vida del cliente para hacerlo sentir como en casa es grandioso.
Como podemos ver, siempre podemos pasar a la acción con poco más de nuestro tiempo, de nuestra voluntad y eso nos dará un impacto mayor, siempre positivo, para otros y para nosotros mismos.
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Imagen de Владимир Берзин en Pixabay
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